Una chica da comida todos los días a un vagabundo, pero luego descubre quién es en realidad

No sin techo

Tom se quedó sorprendido por su repentino arrebato y estaba claro que no se lo esperaba. Respiró hondo y empezó a explicarle toda la situación con todo lujo de detalles. “En realidad no soy un sin techo, Sarah”, le dijo. Aunque se lo esperaba, no dejó de sorprenderla. Pero antes de que pudiera preguntar, Tom continuó. “Soy un agente del FBI que ha estado trabajando de incógnito para investigar una trama de fraude masivo en la zona”